TRAS LAS HUELLAS DIGITAL, SANTO DOMINGO, REPUBLICA DOMINICANA, 27 de junio 2018. –Los delegados de cinco continentes que asistieron al Simposio Global sobre Creación de Capacidades en TIC (ITUCBS Santo Domingo 2018) organizado en esta capital por la Oficina de Desarrollo de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT-D) y el Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones (Indotel) instaron a los gobiernos “a crear entornos favorables para los jóvenes desarrollar sus capacidades de innovación y empresariales, mediante la instalación de centros de innovación e incubadoras que permitan a estos alcanzar su pleno potencial creativo.

Reconocieron que las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) son un factor clave para la consecución de los objetivos de desarrollo sostenible (ODS). “Por esta razón, -apuntaron- las TIC deben integrarse en las políticas nacionales y en la ejecución de proyectos y actividades de desarrollo”.

Observaron asimismo que “la alfabetización digital y otros programas de desarrollo de habilidades digitales son elementos clave de la inclusión digital”.

Señalaron la importancia de la innovación y el espíritu empresarial como factores clave del crecimiento y la productividad en la economía digital. “A medida que las tecnologías digitales siguen evolucionando, nuevos desafíos y oportunidades que surgen, generan un mercado para que la iniciativa empresarial prospere, especialmente entre la población joven inteligente tecno”, señalaron.

Los delegados hicieron sus planteamientos en “los resultados, conclusiones y recomendaciones” del Simposio Global para Capacidades TIC celebrado en Santo Domingo, República Dominicana, con la asistencia de más de 300 expertos, académicos, representantes de la industria y de gobiernos de distintas partes del mundo.

La presentación de las conclusiones estuvo a cargo del experto dominicano y miembro del consejo directivo del Indotel, Fabricio Gómez Mazara, quien fungió como presidente del Simposio. La vicepresidenta de la República, Margarita Cedeño de Fernández; el director general de la UIT-D, Brahima Sanou, y el presidente del Indotel, Luis Henry Molina, presidieron los actos inaugurales del cónclave mundial.

Intervinieron como moderadores Bruno Ramos, director regional de la Oficina de la UIT para las Américas; Maurice McNaughton, director del Centro de Excelencia para Innovación de TI de la Escuela de Negocios y Administración de Mona, Jamaica y Cosmas Zavazava, jefe del Departamento de Proyectos y Gestión del Conocimiento de la UIT;

También, moderaron Enrique Shadah, director de Relaciones Estratégicas de la Oficina de Aprendizaje Digital del MIT de Estados Unidos; Jean Marie Altema, director ejecutivo de Profit Development Consulting de Haití; Susan Teltscher, jefa de la Division de Creación de Capacidades Humanas de la UIT y Santiago Reyes-Borda, asesor principal de política del Departamento de Innovación, Ciencia y Desarrollo Económico de Canadá.

Escasez de habilidades digitales

Los delegados señalaron que en la actualidad existe una escasez de habilidades digitales necesarias para participar de manera efectiva, y para ser competitivos en la economía digital.

“La transformación digital –sostuvieron- tendrá un impacto importante en la calidad y cantidad de puestos de trabajo, con algunas tareas que están siendo  automatizadas, mientras otras se están modificando o son de nueva creación”. Indicaron que esto requerirá la capacidad de la fuerza de trabajo para adaptarse al nuevo entorno y para moverse a través de los sectores y locaciones.

Explicaron que “las habilidades socio-emocionales y analíticas, así como el aprendizaje permanente y ancho de la vida ganarán importancia en la economía digital del futuro”.

Advirtieron que todos los sistemas de Inteligencia Artificial (IA) deben ser diseñados de una manera responsable que incluya los valores éticos, sociales y culturales. “El desarrollo de competencias tiene que tener en cuenta que los sistemas de IA son desarrollados por personas que determinan lo que los sistemas y las máquinas pueden hacer, e integrar sus valores en ellos”, agregaron.

Los delegados reconocieron –asimismo- que las TIC son un factor clave para la consecución de los objetivos de desarrollo sostenible y que, por esta razón, las “deben integrarse en las políticas nacionales y en la ejecución de proyectos y actividades de desarrollo”.

Universidades: adaptarse a cuarta revolución industria

Instaron a los países “a formular agendas digitales nacionales” en procura de convertir  el desarrollo de la economía digital en un imperativo estratégico, en el cual “todas las políticas intersectoriales necesitan estar alineados hacia el logro de ese objetivo estratégico”.

En el desarrollo de las políticas digitales nacionales, los delegados hicieron hincapié en la importancia de la capacitación y el desarrollo de habilidades como un componente integral de la agenda digital, ya que según afirmaron “esto asegurará que en esta era digital la brecha digital no sea sustituida por la brecha del conocimiento”.

En tal sentido, destacaron el imperativo de que las universidades e instituciones de educación superior puedan adaptarse y responder a las necesidades de aprendizaje de la cuarta revolución industrial, precisando que “esta adaptación requiere una planificación estratégica y la previsión informada dentro de la administración de las universidades, la reforma y rediseño del plan de estudios de la universidad y la introducción de nuevos modelos de aprendizaje para adaptarse a las necesidades del alumno, así como las necesidades y expectativas de la economía digital”.

Los delegados reconocieron además, que el desarrollo de habilidades digitales en una economía digital requiere la participación de los diferentes actores en un enfoque de múltiples partes. “Los principales interesados son los gobiernos, el sector privado, instituciones académicas, organismos internacionales de desarrollo, organizaciones de la sociedad civil y las comunidades locales”, enfatizaron.

Resaltaron el importante papel de la UIT desempeña un papel en la facilitación y coordinación de asociaciones para el desarrollo de capacidades para mejorar las habilidades digitales, extrayendo de los ricos recursos y experiencia de sus miembros.

Instaron a la UIT a seguir jugando este papel y reunir a las principales partes interesadas y establecer sinergias en iniciativas de capacitación con el fin de lograr el mayor impacto. “UIT debería seguir facilitando la creación de conocimiento e intercambio para el desarrollo de habilidades en la economía digital”, apuntaron.

Precisaron que trabajar con las instituciones académicas es fundamental en este sentido y que publicaciones como “Construcción de capacidad en un entorno cambiante de las TIC” son valiosas aportaciones para mejorar el conocimiento y un excelente ejemplo de colaboración con el mundo académico”.

Los delegados reconocieron la labor de desarrollo de capacidades emprendidas por la UIT en el marco de su Academia, e instaron a este organismo a seguir apoyando a los países en la formación de capacidades, especialmente en los menos desarrollados, así como a la comunidad en general.