Casi 7.000 agentes garantizarán la seguridad en España durante el G7
TRAS LAS HUELLAS DIGITAL, SAN SEBASTIÁN (ESPAÑA), 22 de agosto, 2019. – Cerca de 7.000 agentes de varios cuerpos policiales garantizarán la seguridad en España y reforzarán la vigilancia fronteriza durante celebración de la cumbre del G7 del sábado al lunes próximos en la cercana localidad francesa de Biarritz.
Esa ciudad será la capital del mundo durante esos tres días y una ciudad blindada con vigilancia terrestre, aérea y marítima y fuertes restricciones para residentes y trabajadores, especialmente en la zona donde se ubica el hotel que acogerá la cumbre.
Francia desplegará 13.200 policías y gendarmes, apoyados por militares.
El Centro de Coordinación Operativo (CECOR) constituido este jueves en la ciudad española de San Sebastián (norte) supervisará todo el dispositivo de seguridad organizado en España para la reunión de mandatarios internacionales, ya que Biarritz está apenas a 30 kilómetros de la frontera.
En la localidad fronteriza española de Irún, varios movimientos sociales desarrollan también estos días una “contracumbre” simultánea de protesta contra la reunión de las siete grandes potencias económicas, a las que se sumará la Unión Europea.
Sus organizadores hicieron un llamamiento a la ciudadanía a participar en los actos “pacíficos” programados y en la manifestación alternativa que el próximo sábado unirá Irún y Hendaya (Francia).
El ministro español del Interior, Fernando Grande-Marlaska, aseguró hoy a la prensa que el plan de seguridad se ha preparado sin “ninguna improvisación”, en colaboración con Francia durante varias reuniones ministeriales durante los últimos meses.
Las autoridades francesas han puesto en marcha medidas de seguridad excepcionales para evitar protestas violentas y prevenir posibles atentados terroristas.
Grande-Marlaska explicó en San Sebastián, a donde viajó para supervisar los preparativos de seguridad, que existen distintos dispositivos para “garantizar” el desarrollo normal tanto de la cumbre como de la “contracumbre”, en “coordinación” con Francia.
En el despliegue español participan 1.878 efectivos de la Guardia Civil y 932 del Cuerpo Nacional de Policía, además de 4.000 agentes de la policías regionales del País Vasco y Navarra, así como de la policía local de Irún.
Un comité permanente formado por el Ministerio del Interior y del gobierno regional del País Vasco hará un seguimiento permanente de la operación de seguridad en España.
Las fuerzas policiales española están “formadas y preparadas para prevenir hechos violentos”, como los ocurridos en otras cumbres. Es “un hecho objetivo” que obliga a adoptar “las medidas necesarias”, justificó el ministro español.