TRAS LAS HUELLAS DIGITAL, SANTO DOMINGO, REPUBLICA DOMINICANA, 7 DE DICIEMBRE 2020-.Al encabezar la graduación de 1,065 estudiantes de un diplomado en desarrollo de software, el ministro de Educación Superior, Ciencia y Tecnología, doctor Franklin García Fermín, afirmó que el MESCYT impulsa los mecanismos necesarios para resolver la demanda creciente de profesionales cualificados del área en el país.

El diplomado es un resultado concreto de la puesta en marcha del proyecto de formación y capacitación de talento humano en desarrollo de softwares creado sobre la base de un convenio suscrito por el MESCYT y la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), con el respaldo técnico del programa República Digital.

García Fermín sostuvo que este esfuerzo tiene su antecedente más importante en un estudio realizado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), cuyo resultado indica que para el 2025 la industria del software empleará más de un millón 200 mil programadores en América Latina y el Caribe.

“El personal de software se hace cada vez más necesario ya que a pesar de que algunas universidades imparten carreras de software, la realidad es que hay un gran déficit de personal cualificado en desarrollo de software para resolver las necesidades tecnológicas de las empresas del país”, enfatizó.

Planteó que a través del proyecto BecaSoft, el MESCYT procura la formación de capital humano en el área de desarrollo de softwares con el fin de impulsar esa industria en el país.

“De esta manera, estamos contribuyendo a incrementar exponencialmente las oportunidades de empleos para miles de jóvenes de uno y otro sexos, con el cual coadyuvaremos al progreso social y al desarrollo económico del país”, agregó.

El funcionario indica que por tal razón, las personas que diseñan, desarrollan y mantienen los programas de computadoras en el país tendrán mayores oportunidades de empleo y desarrollo, lo cual se facilita para los dominicanos por estar dotado de grandes ventajas, como su localización geográfica, situación que permite exportar soluciones informáticas hacia otros destinos.

“En el ámbito educativo, los programas académicos de desarrollo de softwares han crecido exponencialmente, debido al incremento de la demanda de mano de obra local cualificada”, dijo.

Significó que debido a los continuos avances e innovaciones propios del área de desarrollo de softwares, es necesario rediseñar el currículo, contar con un personal docente altamente preparado que instruya y capacite a los estudiantes de tecnologías de punta.

Afirmó que las universidades deben contar con la infraestructura tecnológica para poder impartir este tipo de formación y capacitación, frenar el decrecimiento de la matrícula de las carreras del área de tecnologías y hacerle frente a la demanda de profesionales y técnicos cualificados en los mercados local e internacional.

En ese tenor, el vicerrector administrativo de la UASD, Pablo Valdez, manifestó que el acuerdo interinstitucional entre el MESCYT, la academia estatal y República Digital, para desarrollar el diplomado, busca la solución a un problema que consiste en la baja producción de softwares en el país, lo cual estaba incidiendo en la disminución de la competitividad de las empresas, las instituciones y la nación.

De su lado, el decano de la Facultad de Ciencias de la UASD, Radhamés Silverio, sostuvo que el desarrollo de software es de prioridad nacional porque contribuye a enfrentar los retos de una república digital y reducir los niveles de dependencia en materia tecnológica, proceso que permite pasar de consumidores a creadores de tecnologías.

Las palabras de agradecimiento fueron pronunciadas por la estudiante Darlene Reynoso Gutiérrez, egresada de mayor índice del Programa de Inteligencia de Negocios y Big Data.

En el acto estuvieron presentes el viceministro del MESCYT, Genaro Rodríguez Martínez, el asesor especial, Julio Altagracia; el director de Fomento y Difusión de Ciencia y Tecnología, Andrés Merejo; la directora de la Escuela de Informática de la UASD, Raysa Vásquez; el coordinador de programas especiales de la Rectoría, Ariosto Rojas, entre otros.