Haití anuncia elecciones generales y referéndum constitucional en abril

TRAS LAS HUELLAS DIGITAL, Puerto Príncipe, 8 DE ENERO, 2021.– En los meses de abril y septiembre próximos, Haití llevará a votación el referéndum constitucional y las principales autoridades del país, respectivamente, anunció hoy el Comité Electoral Provisional (CEP).

El CEP cuya instalación fue objeto de controversia y críticas de varios sectores, confirmó que el referéndum sobre la nueva carta magna tendrá lugar el 25 de abril, mientras la primera vuelta para elegir al presidente y los legisladores ocurrirá el 19 de septiembre.    Una segunda vuelta está prevista para el 21 de noviembre, fecha en que también se llevarán a cabo los comicios locales y municipales.

Ya la comisión que debe renovar la ley fundamental divulgó algunos cambios de ese texto, que incluyen un regreso al régimen presidencial, la abolición del Senado, inclusión de representantes de la diáspora en el parlamento unicameral, así como la eliminación de la prohibición de doble nacionalidad. El texto final del anteproyecto debe estar disponible en febrero próximo.

Sin embargo, los principales contrarios al actual gobierno recuerdan que la ley de leyes vigente prohíbe expresamente la consulta popular para su modificación. Añaden la falta de legitimidad del presidente Jovenel Moise y lo acusan de dar pasos hacia un régimen dictatorial.

En cuanto a los sufragios, las fuerzas opositoras negaron su participación, mientras reiteran que el presidente debe abandonar el poder el 7 de febrero próximo, y argumentan las disposiciones de la constitución vigente. Estas plataformas abogan por un gobierno transitorio de tres años, para luego organizar elecciones generales.

Desde enero de 2020, Moise gobierna por decreto al vencerse los mandatos de los diputados y de dos tercios de los senadores, y con un proceso electoral postergado desde 2018 en medio de la inestabilidad política y social, además de la crisis económica.

Recientemente, recibió el apoyo de Naciones Unidas y la OEA para la renovación del personal político, no obstante, al interior encuentra cada vez más resistencia de una pujante aunque desestructurada oposición.