La unidad fungirá como laboratorio regional de patología y consta de dos salas de autopsias con cuatro camillas para trabajar simultáneamente, un quirófano, con la finalidad de realizar trasplante de órganos, un cuarto frío con capacidad para preservar 17 cadáveres.
Asimismo, un laboratorio de patología con cabina de bioseguridad con todas las herramientas que complementa los requisitos que amerita un laboratorio académico y de diagnósticos preciso.

El ministro de Salud Pública, Daniel Rivera, destacó la apertura de esa unidad de laboratorio de patología forense y dijo que la misma impactará a las catorce provincias de la región del Cibao.

Por su lado, Bernardo Hilario, director del Cabral y Báez, agradeció  al presidente Luis Abinader, a la vicepresidenta Peña, a las autoridades sanitarias y a los demás funcionarios de esta administración que han aportado para que este hospital brinde atenciones médicas con calidad y humanismo.

A la actividad asistieron el presidente del Senado, Eduardo Estrella, la gobernadora provincial de Santiago, Rosa Santos, el ministro de la Vivienda, Carlos Bonilla, el viceministro de Salud, Fernando Ureña, el director Norcentral del Servicio Nacional de Salud, Manuel Lora Perelló, el director de Proindustria, Ulises Rodríguez y el director de Edenorte, Andrés Cueto.

La Unidad de Laboratorio de Patología Forense estará bajo la responsabilidad de la doctora Ketty Domínguez.