RD llama a Rusia y a Ucrania no cruzar la línea de contacto para evitar un conflicto mayor

TRAS LAS HUELLAS DIGITAL, SANTO DOMINGO, REPÚBLICA DOMINICANA, 24 DE FEBRERO, 2022.  La República Dominicana hizo un llamado este miércoles ante la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) a que ninguna de las partes involucradas en el conflicto en Europa del Este cruce la línea de contacto y a que cese toda injerencia en los asuntos internos de otros Estados, “especialmente aquellas que exacerban pasiones o instigan a la violencia”.

Durante su intervención ante el órgano principal de la ONU convocado para tratar la situación entre Rusia y Ucrania, el embajador dominicano, José Blanco, agregó que República Dominicana no acepta que el derecho internacional sea quebrantado, ni que el orden internacional basado en reglas libremente aceptadas se rompa.

“En un escenario de violencia y actos de fuerza no habría vencedor. Todos perderíamos, no importa si somos Estados grandes o pequeños”, expresó el diplomático.

Dijo que se debe evitar una conflagración mayor, por lo que consideró que es el momento de privilegiar, con urgencia, el diálogo y la negociación diplomática.

El representante permanente de República Dominicana en la ONU añadió que ante el reconocimiento unilateral como repúblicas independientes a las regiones de Donetsk y Luhansk, parte integral del territorio de Ucrania, Estado miembro de pleno derecho de las Naciones Unidas, Rusia vulnera tres principios básicos del derecho internacional.

Los principios que según el diplomático vulnera Rusia son el respeto a la integridad territorial de los Estados; el compromiso de resolver las controversias por métodos pacíficos y de abstenerse de recurrir a la amenaza o al uso de la fuerza; y el respeto a la independencia política y la no intervención en los asuntos internos de otros Estados.

“Esta situación ha creado las condiciones para una expansión de la actual confrontación bélica en el Este de Ucrania, afectando la paz en la región y con el potencial de extenderse a otros países que integran nuestra organización. El eco de las armas afectaría, además, la economía, la política, la estabilidad social de toda la región y generaría un caos en los mercados globales, incluyendo al sector energético y a las cadenas de suministros de alimentos”, señaló.