Asegura que alianza para el Desarrollo en Democracia podría generar 500 mil empleos en República Dominicana
Por la redacción
TRAS LAS HUELLAS DIGITAL, Santo Domingo, REPÚBLICA DOMINICANA, 3 DE ABRIL, 2022- El presidente de la Cámara Americana de Comercio aseguró que la Alianza para el Desarrollo en Democracia que integran Costa Rica, Panamá y la República Dominicana, a la que se ha sumado los Estados Unidos, podría generarle al país 500 mil empleos en los próximos seis o siete años.
Roberto Herrera dijo que para ello se requiere que el país pueda generar las infraestructuras para facilitar los espacios a compañías norteamericanas que en la actualidad tienen sus operaciones en el continente asiático, para que venga a fabricar sus productos desde acá.
Herrera agregó que igual oportunidad se presenta para Costa Rica y Panamá, dependiendo de a los niveles de especialización y atractivos que puedan tener esos países, ya que al fin y al cabo lo que se necesita es generar empleos formales y de calidad, que es lo que se persigue a través de la citada Alianza.
Entrevistado por Héctor Herrera Cabral en el programa D´AGENDA que cada domingo se difunde por Telesistema Canal 11 y TV Quisqueya para los Estados Unidos, el líder empresarial dijo que todo eso se traduciría en un crecimiento económico para las economías de los países que conforman la Alianza.
Sostuvo que República Dominicana, panamá y Costa Rica representan el tercer socio Comercial de los Estados Unidos, si se unen los tres, solamente por debajo de Brasil y México, pues tienen una población cercana a los 20 millones de habitantes.
Nosotros calculamos que en República Dominicana gracias a esta alianza y este acercamiento con Estados Unidos que nos ve como su socio confiable, y que no le llevamos problemas, pudiéramos generar al país unos 500 mil empleos, si nos concentramos en generar la infraestructura para facilitar los espacios a estas compañías que están hoy en Asia, y que vengan a la fabricar los productos desde acá, esa posibilidad existe, no diría que de la noche a la mañana, pero en los próximos seis o siete años, si se dan esas condiciones”, reiteró Roberto Herrera.
Explicó que ahora lo que se busca es que los países de la Alianza se tomen estos meses, antes de la Cumbre de las Américas que se celebrará en el mes de junio en los Ángeles, para llevar propuestas concretas a Estados Unidos, que se ha sumado de manera entusiasta a este pacto.
“Ahora la alianza se llama, Alianza para el Desarrollo en Democracia más Estados Unidos, o sea, que ya no es solo Costa Rica, Panamá y República Dominicana, sino que, con la suma de Estados Unidos, el sector privado de ese país va a tener un rol de importancia de la mano con nosotros”, detalló.
El presidente de la Cámara Americana de Comercio argumentó que ese sector privado norteamericano, porque son ellos que verán en los países de la Alianza las oportunidades que existen para ellos instalar sus fábricas y empresas, y que “podamos aprovechar esa cercanía con Estados unidos y demostrarle que es mejor negocio, hacer negocios con estos países que estamos cerca, pero que también utilizamos muchos insumos producidos en esa nación”.
Dijo que las compras de esos insumos generan más trabajo e ingresos en los Estados Unidos, lo que significa ganar-ganar para todos los que están en la Alianza. “Tenemos mucho optimismo con esto, y pensamos que esto va ser muy significativo para nuestros países y, quizás, otros que se puedan sumar más adelante”, aseveró.
Recordó que en el marco de la cumbre en Perú la vicepresidenta de EU Kamala Harris envió un mensaje dándole un espaldarazo a la Alianza, pero antes de eso lo había hecho el presidente Joe Biden en su discurso del 10 de diciembre, justo concluyendo el encuentro de Puerto Plata, y hace dos o tres semanas el canciller dominicano, junto con sus colegas de Panamá y Costa Rica, tuvieron una reunión con el secretario de Estado Antonhy Blinken donde se reiteró el respaldo. Dijo que “luego de ese encuentro viajó una comisión de alto nivel de funcionarios de Estados Unidos a participar en la Cumbre porque en el pasado, en las dos cumbres anteriores, no había presencia norteamericana.
El dirigente empresarial sostiene que la Cámara Americana de Comercio se considera actor de primer orden en este esfuerzo, por parte del sector privado, junto al liderazgo de Don Samuel Conde presidente fundador de esa iniciativa. Recordó que la iniciativa nace en la República Dominicana, y recibió el concurso y beneplácito de los Estados Unidos, y también de Costa Rica y Panamá, cuyos presidentes son Luis Abinader, Carlos Alvarado Quesada y Laurentino Cortizo.
Roberto dijo que existe una gran expectativa para la venidera Cumbre de las Américas a celebrarse en junio en Los Ángeles, y mostró su esperanza de que allí se pueda crear una especie de fondo de compensación para hacerle frente a los choques coyunturales que ocurren, y que son ajenas a los tres países. Esa posibilidad ya fue tanteada en la reunión que sostuvieron los ministros de Hacienda de la Alianza que participaron en la última cumbre.
Presidente Cámara Americana de Comercio dice preocupa volatilidad en mercado provocada por invasión Rusia a Ucrania.
Para el presiente de la Cámara Americana de Comercio resulta preocupante la volatilidad de los mercados debido a los efectos de la invasión de Rusia en Ucrania. Recordó que ya la pandemia del coronavirus había afectado todo el buen desenvolvimiento del país, principalmente al sector turístico, el cual por suerte ya está en proceso de recuperación, y se espera que se recupere totalmente.
“No bien pensamos que estábamos saliendo de esta situación, y aunque veíamos amenazas de factores externos a la economía dominicana, como la fluctuación de los precios de los combustibles, por ejemplo, inflación importada, pues ya veíamos ciertas amenazas, y ciertamente esta invasión de Rusia a Ucrania, ha venido a generar más volatilidad en el mercado, lo que es de preocupación”, pondero el empresario Roberto Herrera.
Herrera dijo que por suerte las autoridades monetarias y fiscales han tomado medidas importantes para tratar de hacerle frente a esa situación.
“No obstante nos toca a cada uno tomar las medidas correspondientes en empresas y sectores, para hacerle frente a un enemigo que no es culpa de nadie, no es algo que nosotros queríamos, sino que, sencillamente dependemos, al ser una economía abierta, de lo que ocurre alrededor nuestro”, ponderó el líder empresarial. Recordó que la República Dominicana no es productora de petróleo, ni tiene reservas del carburante en cantidad probada suficiente.
“Y, por ende, toda la economía depende de algún tipo de derivado del petróleo para el proceso productivo, la generación eléctrica, y el transporte, y ciertamente estos vaivenes que han tenido los precios internacionales nos impactan negativamente como país”, subrayó. Explicó que, como consecuencia de eso, se ve aumentos importantes de todo lo que tiene que ver con los rubros productivos debido, principalmente a lo importado, que es ajeno a nosotros.
Insistió en que eso es un tema de preocupación, y por eso, todos los sectores están constantemente trabajando para ver si se le hace frente, y esperando a ver si ese conflicto se detiene, que las aguas vuelvan a su nivel, y retomar la senda del crecimiento que ya venía en recuperación. El dirigente empresarial dijo que también le preocupa que en China nuevamente se está produciendo cierre por el tema del coronavirus.
Reconoció que esos factores tienen incidencias en costos de producción y precios final de bienes y servicios para la población, “porque se trata de una relación directa que viene a impactar, y por eso el gobierno ha tomado medidas para asistir a los que más lo necesitan, y ha aumentado los diferentes subsidios a los rubros que tanto impactan a la canasta familiar”.
El presidente de la Cámara Americana de Comercio dijo “que desde el sector privado se hacen esfuerzos para ser más eficiente en la producción, y buscar la manera de evitar que esas alzas sean descontroladas, dentro de lo que tiene que ver, con lo que está bajo los controles de las empresas”.
Explicó que la idea es que las empresas puedan hacerle frente a esa ola de volatilidad que les está trayendo el mundo y, de la cual, la República Dominicana no escapa.