126 instituciones del país realizan hoy votaciones para conformar Comisiones de Integridad Gubernamental y Cumplimiento Normativo
TRAS LAS HUELLAS DIGITAL, SANTO DOMINGO, REPÚBLICA DOMINICANA, 27 DE MAYO, 2022. La Dirección General de Ética e Integridad Gubernamental (DIGEIG), informa que este viernes se concluye la 2da. fase del proceso del llamado a elecciones colectivas en 126 instituciones públicas del país, este proceso ha tenido de fondo un accionar consultivo y participativo, de más de 4 talleres en los que se ha estado estimulando e instruyendo para la formación de las CIGCN.
Estas informaciones fueron ofrecidas por el director de Ética de la DIGEIG, Yovanny Díaz Mendoza, quien además resaltó que las Comisiones de Integridad es una fase evolutiva de lo que anteriormente se llamó las comisiones de Ética, y que basados en los indicadores de los resultados obtenidos con las Comisiones anteriores, se pudo determinar que las mismas no ejercían una función eficiente.
“La ética del servidor público es cumplir las normas y servir al bien general y colectivo, porque en definitiva hacia allá es el objetivo. Nosotros tenemos que hablar de la ética que se parece al ciudadano dominicano que va a buscar el servicio público y que tiene que salir de allí con felicidad, porque la felicidad también es un derecho fundamental”, destacó Díaz.
Reveló que la República Dominicana nunca ha contado con una estrategia en contra de la corrupción, ni objetivos claros de cómo combatirla hasta este momento, señalando que en el año 2015 cuando se hicieron las consultas para la generación de los planes de desarrollo económico en todas las provincias, el eje consultado número 13 era la corrupción.
“La inversión pública no puede ser efectiva en un marco de antivalores donde la corrupción se convierte en la regla, ahí es donde la ética, donde la integridad y el Cumplimiento Normativo genera felicidad al pueblo dominicano porque nos va a permitir desarrollarnos”, expresó Díaz.
Explicó que no son las consecuencias lo que debemos combatir, sino las causas del problema, y que, para poder construir una cultura diferenciada, es necesario tomar un punto y aparte que debe estar en la administración pública. “En el marco de la causa necesitamos tener servidores públicos que se conviertan en paradigmas para poder tener la moral y la posibilidad de dirigirnos a la población y que la población pueda creer en nosotros, para que el control social y la transparencia sea una realidad”.
Habló también sobre el derecho que tiene la ciudadanía a participar dentro del marco de los asuntos públicos, situación que no es posible cuando hay opacidad, y que solo puede ser logrado con una estrategia para enfrentar este fenómeno desde el Estado.
“Estamos hablando de que esto no es una política de corrupción, sino de una conducta en el servidor público, en el ciudadano, entonces esto solo se puede transformar en el marco de generar los ejemplos positivos para poder crear la cultura de integridad”, señalo.