Instituto Nacional de Migración inaugura seminario internacional sobre migración laboral

TRAS LAS HUELLAS DIGITAL, SANTO DOMINGO, REPÚBLICA DOMINICANA, 22 DE SEPTIEMBRE 2022.-  El Instituto Nacional de Migración inauguró el Seminario Internacional: Migración Laboral en América Latina y el Caribe con la presencia de importantes actores que contribuyen a la modernización de la gobernanza migratoria en la región.

El acto, realizado ayer miércoles 21 de septiembre, contó con las palabras de bienvenida de Germania Estévez, encargada del Departamento de Investigación y Estudios Migratorios del Instituto Nacional de Migración, quien señaló que el propósito del seminario es “articular espacios de reflexión orientados, fundamentalmente, a discutir las dinámicas actuales y los modelos de buenas prácticas a nivel global, regional y local sobre migración laboral, así como propiciar discusiones que permitan identificar necesidades de conocimiento en torno al tema migratorio y alimenten un programa de investigación que impulse políticas orientadas al desarrollo nacional”.

Josué Gastelbondo, jefe de misión de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), añadió que “la migración laboral es un consenso entre todos. Es la principal causa de la migración en el mundo y puede ser una herramienta clave para varios temas, entre estos, combatir el tráfico ilícito de migrantes y fortalecer el vínculo esencial entre migración laboral y regularización migratoria”.

Por su parte, Noortje Denkers, especialista en Migración Laboral y Movilidad de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), manifestó que “La migración laboral internacional, ese desplazamiento de personas de un país a otro motivado, inspirado e impulsado por la obtención de un trabajo y el acceso a mejores oportunidades de ingreso, es una característica de los mercados laborales contemporáneos y una clave para entender el futuro del trabajo”. En ese sentido, resaltó que, según las últimas estimaciones de la OIT, en el mundo hay 272 millones de migrantes internacionales, de los cuales 169 millones (62 %) son personas trabajadoras migrantes. Asimismo, apuntó que:

 

De ellas el 58 % son hombres y el 42 % mujeres. Otra clave para entender la acción: el importante número de mujeres en esa fuerza trabajadora migrante internacional, que tiene demandas específicas y requiere respuestas diferenciadas. Esos 169 millones de personas trabajadoras migrantes representan el 5 % de la mano de obra mundial. Es decir, son parte activa de la economía mundial. En nuestra región de América Latina y el Caribe, se encuentran 5,9 millones, mientras que en Estados Unidos y Canadá se concentran 37,4 millones.

 

En el discurso de apertura, el Dr. Wilfredo Lozano, director ejecutivo del INM RD, expresó la particular importancia del seminario para los países de la región latinoamericana y caribeña. “El fenómeno migratorio indudablemente constituye uno de los componentes esenciales de la realidad internacional actual. Ahora mismo, para casi todos nuestros países las migraciones son doblemente relevantes, puesto que está sucediendo una acelerada inmigración, pero también se aprecia un alto componente emigratorio en la mayoría de ellos”.

 

La conferencia magistral del acto inaugural estuvo a cargo del economista y politólogo alemán Dr. Jürgen Weller, quien disertó sobre los efectos de la pandemia del COVID-19 en los mercados de trabajo en los países de Latinoamérica, con atención al conglomerado de trabajadores migrantes. El Dr. Weller concluyó que, durante la pandemia, hubo una fuerte retirada de trabajadores del mercado laboral, aumentó la desocupación abierta, se redujeron horas laborales y la caída del empleo afectó, principalmente, a mujeres, jóvenes y migrantes. De igual forma, destacó que “La migración internacional se vio afectada por el cierre de las fronteras, la crisis social, la experiencia de pérdida de empleo, menos opciones de trabajo remoto, así como la necesidad de trabajar lo que sea, por debajo del nivel calificado, y exponerse a los riesgos de salud por tomar trabajos de primera línea sin acceso a las instituciones de salubridad”.