TRAS LAS HUELLAS DIGITAL, SANTO DOMINGO, REPÚBLICA DOMINICANA, 29 DE DICIEMBRE, 2023. El magistrado Napoleón Ricardo Estévez Lavandier fue posesionado presidente del Tribunal Constitucional (TC) por miembros del Consejo Nacional de la Magistratura (CNM) junto a los jueces Fidias Federico Aristy Payano, Sonia Díaz Inoa, Army Esperanza Ferreira Reyes y Amaury Amílcar Reyes Torres.

 Al dirigir su primer discurso como presidente del TC, el magistrado Estévez Lavandier, expresó el gran honor y la gran responsabilidad que significa ser investido como presidente del Tribunal Constitucional de la República Dominicana, un reto que dijo acepta con humildad y con profunda gratitud a su patria.

 «Hoy colgamos la toga de juez supremo y nos ponemos toga de juez constitucional», expresó durante el acto efectuado en la sede de la alta corte.

 Destacó que, aunque han pasado solo doce años desde que el TC se convirtiera en una realidad, ha sido mucho el camino recorrido, tanto por el tribunal como por la democracia y las diferentes instituciones. «No cabe duda de que el balance de estos doce años de trayectoria de nuestro TC, que corre paralelo al de nuestra carta magna, es netamente positivo. El salto cualitativo que dio nuestra democracia a partir de la aprobación de la Constitución que nos rige es innegable. Dejamos atrás cualquier vestigio de regímenes autoritarios y arbitrarios para definirnos plenamente como un Estado social y democrático de derecho», enfatizó.

El magistrado Estévez Lavandier resaltó que ha quedado probado que esta alta corte es un actor fundamental en el equilibrio de poderes del país y en la estabilidad democrática, pero que existen muchos desafíos por lograr para que la institución siga cumpliendo a cabalidad su tarea de apuntalar los derechos fundamentales.

Destacó la tarea que tienen los nuevos integrantes del TC de reforzar las capacidades y la independencia de esta institución, perfilando su carácter de órgano extrapoder sometido únicamente a la Constitución de la República.

«Este TC le reafirma hoy al pueblo dominicano que, con la Constitución en mano, como sagrada herramienta, defenderá, protegerá y sobrepondrá siempre la soberanía, la nacionalidad, la dignidad humana, los derechos fundamentales, el orden constitucional y la democracia, teniendo como único límite el respeto de las competencias de los poderes del Estado», afirmó.

Garantizó que este TC, compuesto siempre por trece dignos dominicanos y dominicanas, está preparado para enfrentar exitosamente todos los retos que los ciudadanos y las ciudadanas pongan ante esta jurisdicción, siempre contando con la bendición de Dios y el fervor de los padres de la patria.

«Durante los próximos nueve años que durará esta presidencia, la República Dominicana continuará su indetenible avance social, económico y legal. Nuestro único aporte es acompañar esta transformación con la voluntad férrea de seguir fortalecimiento nuestro Estado social y democrático de derecho», agregó.

Entre sus nuevos retos mencionó que velarán por el más estricto respeto a la carta magna y su aplicación en todos los ámbitos y actuaciones, así como el respeto absoluto de los derechos fundamentales; aplicar prácticas éticas, sólidas y buenas conductas intachables, además de mantener altos estándares de transparencia y rendición de cuentas.

Afirmó que también pondrán a disposición de la sociedad dominicana mecanismos de evaluación periódica del desempeño de la alta corte y seguirán desarrollando la labor pedagógica en torno a la carta magna y a las decisiones de este alto tribunal, además de trabajar de cerca con los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial.

Bienvenida del presidente emérito

El presidente emérito, magistrado Milton Ray Guevara, dio la bienvenida al nuevo presidente y a los nuevos jueces que se integran al TC, a quienes auguró que realizarán una excelente labor e invitó a que sigan trillando el camino de respeto y reconocimiento que se ha ganado esta alta corte.

Ray Guevara dio sentirse profundamente complacido por la forma ejemplar en que se ha desarrollado todo este proceso y cómo «hemos demostrado que la institucionalidad tiene éxito en la República Dominicana».

«Pido a Dios todopoderoso que derrame sobre ustedes la mejores y abundantes bendiciones para que puedan cumplir con ese mandato que han recibido tan importante para el pueblo dominicano», resaltó.

En nombre del Consejo Nacional de la Magistratura, el presidente del Senado, Ricardo de los Santos, resaltó la labor realizada por el TC durante estos doce años, destacando que ha sido un referente por su fecundo desempeño jurisdiccional y por la extraordinaria labor administrativa.

De los Santos felicitó el trabajo realizado y afirmó que el reto es consolidar y mejorar lo que se ha logrado hasta ahora.

Al presidente Napoleón Ricardo Estévez Lavandier y a los demás magistrados le auguró muchos éxitos y afirmó estar seguro de que todos estarán a la altura de las circunstancias.

Acto protocolar

El encuentro estuvo encabezado por los representantes del Consejo Nacional de la Magistratura Ricardo de los Santos, presidente del Senado; Alfredo Pacheco, presidente de la Cámara de Diputados; Miriam Germán Brito, procuradora general, y Nancy Salcedo, jueza de la Suprema Corte de Justicia y secretaria del Consejo Nacional de la Magistratura.

 En el acto protocolar de toma de posesión de los nuevos jueces y de transición presidencial participaron el magistrado presidente emérito del TC, Dr. Milton Ray Guevara y de los jueces que concluyeron su período, también eméritos: Rafael Díaz Filpo, primer sustituto del presidente; Lino Vásquez Sámuel, segundo sustituto; Víctor Joaquín Castellanos Pizano y Justo Pedro Castellanos Khoury.

En la actividad también fueron posesionados el magistrado Miguel Valera Montero como primer sustituto del presidente del TC, y la magistrada Eunisis Vásquez Acosta como segunda sustituta.

Como parte del acto oficial, el magistrado presidente emérito, Dr. Milton Ray Guevara, entregó al magistrado presidente, Napoleón Ricardo Estévez Lavandier, los símbolos del Tribunal Constitucional, representados en una Constitución dominicana, la ley orgánica y el mallete.