SANTO DOMINGO, REPUBLICA DOMINICANA,  13 de mayo, 2014. -El cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez reiteró este lunes su respaldo a la sentencia 168-13 del Tribunal Constitucional que fija los criterios para otorgar la nacionalidad, y que definió como un instrumento legal para pautar la conducta dominicana en términos migratorios.

“Después de estar en el desorden mayúsculo que hemos vivido, es necesario que tengamos definitivamente un instrumento legal que sea el que paute la conducta de República Dominicana en términos migratorios», manifestó el religioso en su defensa a la decisión del TC que ha originado fuertes y acalorados debates.

Al oficiar una eucaristía con motivo al 75 aniversario de la creación de la Dirección General de Migración, el prelado católico reiteró que en torno al polémico fallo del Constitucional existe una confabulación internacional perversa, de naciones que no tienen autoridad moral para hablar del tema.

“No les luce lo que están haciendo, porque son igualmente o peor, injustos, no tienen autoridad moral para hablar de eso. Nunca han tenido respeto por nadie y viven burlándose de todo el mundo. Vayan a mandar a sus casas y después vamos a hablar si usted quiere y me respeta”, expresó el purpurado.

Pidió a los dominicanos defender su identidad y no permitir que el país siga siendo «mojiganga» de organismos internacionales.

En otro orden, López Rodríguez se manifestó a favor de que se plantee una solución definitiva al trasiego sin control de personas en el territorio nacional.

Director Migración: Es preciso no dejarse arropar por el victimismo migratorio

El director general de Migración, José Ricardo Taveras, expresó que es preciso que el país no se deje arropar del «vacuo y estéril discurso del victimismo migratorio» anunció que muy pronto solicitará al presidente que rompa el famoso formulario de control de embarque.

La Dirección General de Migración (DGM) remitió hoy las palabras de Taveras en la misa de Acción de Gracias con motivo del 75 aniversario de la institución, que, dijo, es «financieramente pobre pero ordenada».

En su discurso, Taveras criticó el discurso del «victimismo migratorio», que «administran grupos de interés», así como los estereotipos «propios del argumento ‘ad hominem’, que pretende acorralar nuestra imagen como nación frente al mundo».

«No podemos sentirnos tan orgullosos como quisiéramos de la forma blanda y rutinaria con que asumimos nuestro control migratorio en general durante muchos años. Sin embargo, justo es reconocer que fuimos construyendo, poco a poco, una nueva institucionalidad, un deseo de la procuración del orden migratorio», expuso.

Asimismo, expresó que viene advirtiendo desde hace tiempo, que es necesario un «cambio de actitud con el tema».

«El ruido, que parecería debate, prefiere la polvareda mediática sustentada en el victimismo para no dejarnos ver con seriedad que una adecuada política migratoria, el respeto por la identidad, integración ordenada y legal de extranjeros, así como la construcción de responsabilidades comunes resulta vital», dijo.

Aseguró que la DGM avanza para dotar al país de un control migratorio, registro de extranjería y control de permanencia eficaces y modernos.

Asimismo, apuntó que el aparato migratorio de la nación dominicana, según lo van permitiendo las posibilidades, se encuentra en un proceso de transformación institucional «profundo».

Anunció que en este mes se está completando la incorporación de todos los puertos y marinas del país a la red de la institución, medida con la que no existirá ningún punto de ingreso aéreo, marítimo o terrestre, donde el control electrónico de ingreso, en línea, no esté disponible.

«Estos avances también nos permiten anunciar que la Información Avanzada de Pasajeros (APIS) es una realidad que nos permitirá ejercer un control electrónico total, de todo pasajero que entre o salga del país, en una primera etapa por la vía aérea y a corto y mediano plazo dicho proyecto podrá ser extendido a los que ingresen por vía marítima o terrestre», señaló.

«Muy pronto», agregó, pedirá al presidente Danilo Medina presidente que «rompa» el famoso formulario de control de embarque o «papelito blanco», como es conocido popularmente, «como un símbolo de la incorporación del país a la modernidad de una migración que será cada vez más invisible, pero más efectiva».