El pequeño Piper PA-34 informó de problemas con el motor y perdió el contacto con el control del tráfico aéreo mientras sobrevolaba el suroeste de Kentucky alrededor de las 17:55 CST, según la Administración Federal de Aviación (FAA).

Una media hora después, un residente del condado de Lyon llamó al número telefónico de emergencias y contó a los agentes que una niña de 7 años había llegado andando a su casa y decía que había estado implicada en un accidente de avión, dijo el sargento Dean Patterson de la policía estatal Kentucky.

«La niña salió de entre los restos ella sola, encontró la vivienda más próxima e informó del accidente del avión», dijo Patterson. «Es un milagro porque sobrevivió, pero es trágico que otros cuatro no lo hicieran».

La niña tenía un shock emocional y fue llevada a un hospital con lesiones que no ponían en riesgo su vida, dijo el agente. En ese momento, las autoridades iniciaron una operación de búsqueda para dar con el lugar del accidente y también confirmaron con la FAA que habían recibido una llamada de socorro.

Alrededor de dos horas más tarde, las autoridades encontraron el sitio del choque en una zona boscosa cerca del lago Kentucky, una popular atracción turística del estado. Descubrieron cuatro cuerpos, incluyendo el del piloto y tres pasajeros.

La FAA dijo que la avioneta despegó del aeropuerto regional de Tallahassee, en Florida, y se dirigía a Mount Vernon, en el estado de Illinois. Patterson señaló que la niña declaró que la aeronave partió de Key West, Florida.

Patterson dijo en un comunicado que las víctimas del accidente ocurrido el viernes por la noche fueron identificadas como Marty Gutzler, de 49 años; Kimberly Gutzler, de 45; su hija de 9 años Piper Gutzler; y su prima de 14, Sierra Wilder. Los cuatro eran de Nashville, Illinois. La policía dijo que el nombre de la menor de 7 años no se hace público a petición de la familia.

El funcionario explicó que estuvo lloviendo en la zona durante la mayor parte del viernes. La causa del accidente está siendo investigada.