Procurador inicia programa para desmonte de masculinidad violenta en privados de libertad
TRAS LAS HUELLAS DIGITAL, SANTO DOMINGO, REPÚBLICA DOMINICANA, 18 de noviembre 2019. -Al encabezar la apertura del Programa de desmonte de la masculinidad violenta a hombres privados de libertad, el procurador general de la República, Jean Rodríguez, dijo que con su implementación procuran modificar las conductas abusivas de los hombres que cumplen prisión por violencia intrafamiliar basada en género, lograr el cese de la violencia machista y evitar la reincidencia.
Destacó que el programa se enmarca dentro de las 22 acciones del Plan Nacional Contra la Violencia de Género que vienen implementando desde hace 2 años como parte de la política institucional para fortalecer la prevención, la persecución y la protección de las víctimas de estos delitos.
“La perspectiva de género nos ha mostrado, sin duda, que la violencia de género no es un problema de las mujeres sino un problema para ellas, un problema del que sufren sus efectos, un problema de una sociedad androcéntrica y patriarcal que las inferioriza y que se resiste al cambio”, dijo el jefe del Ministerio Público durante su intervención donde expresó que buscan desmontar la violencia machista y establecer una cultura de paz.
Sostuvo que la violencia de género es un problema de los hombres, que son quienes la ejercen para mantener el orden de género, la toleran y la legitiman con mayor frecuencia. «Los hombres no nacen violentos, sino que esta es una conducta aprendida», dijo.
Manifestó en ese sentido, “frente a esta realidad, que posiciona a la violencia contra las mujeres como una problemática conductual de quien ejerce dicha violencia, y como parte del Plan que estamos ejecutando para reducir estos lamentables casos, hemos apostado a la intervención conductual del agresor como un eje importante de nuestra política de acción”.
Precisó el procurador general que esa decisión descansa en el éxito que ha tenido durante 11 años de trabajo el Centro de Intervención Conductual para Hombres del Distrito Nacional, interviniendo más de 30,000 mil casos para la desconstrucción, enseñanza e identificación de los idearios de la masculinidad violenta de los agresores en materia de violencia de género e intrafamiliar y delitos sexuales.
Rodríguez expresó que han decidido replicar esas metodologías en los centros de corrección y rehabilitación del Nuevo Modelo de Gestión Penitenciaria, poniendo en marcha el primer programa especializado para el desmonte de la masculinidad violenta dirigido a los privados de libertad por violación a la Ley No. 24-97 de Violencia Contra la Mujer e Intrafamiliar en la República Dominicana.
Explicó que este programa de desmonte de masculinidad violenta estará basado en un manual que unificará los criterios y técnicas utilizados tanto en los centros de intervención conductual como en los centros penitenciarios, iniciando el piloto con los internos pertenecientes al Nuevo Modelo Penitenciario, para luego replicarlo en los demás recintos penitenciarios del país.
Detalló el procurador general que con la iniciativa, estarán trabajando de manera simultánea en el tratamiento, rehabilitación y posible reinserción social de los internos, de modo que al terminar sus condenas o su tiempo de privación de libertad puedan reintegrarse a la sociedad sin constituir una amenaza para la población.
El acto para el inicio del programa se desarrolló en el Auditorio de la PGR con la participación de la titular de la Dirección Contra la Violencia de Género, Ana Andrea Villa Camacho; el director del Centro de Intervención Conductual para Hombres del Distrito Nacional, Luis Vergés, y el director de Prevención de la Criminalidad del Ministerio Público, Vladimir Hernández.
PGR destaca impacto que tendría en cambio positivo de conductas violentas
La Procuraduría General de la República difundió la información a través de un comunicado de prensa donde destaca que la iniciativa está orientada a detener la conducta violenta, garantizando que el participante asuma su responsabilidad sobre los actos y manifestaciones de violencia, así como lograr una reducción significativa de la violencia psíquica y que tengan una mayor capacidad para resolver los conflictos de la vida cotidiana.