Gobierno dominicano tiene sumo interés en las exportaciones de productos agropecuarios

TRAS LAS HUELLAS DIGITAL, REPUBLICA DOMINICANA, SANTO DOMINGO, 26 DE NOVIEMBRE, 2020. El ministro de Agricultura, Limber Cruz, declaró que las relaciones comerciales y bilaterales con el vecino país de Haití son importantes para la República Dominicana, ya que es un mercado cautivo y que se puede aperturar más aprovechando la cercanía y las facilidades de transporte y envío.

Indicó que a su llegada al Ministerio propuso realizar el mercado binacional con Haití todos los días de la semana, pero que para eso falta que haya una combinación de ambos países que lo hagan posible.

Cruz se refirió a este y otros temas al participar de una entrevista en el programa Zol de la Mañana, donde indicó que una de las metas del Gobierno es impulsar las relaciones y el comercio internacional, con más exportaciones de productos del agro dominicano.

En cuanto al tema de los permisos de importación, informó que las subastas que se realizaban a través de la Bolsa Agroempresarial encarecían el precio de los productos agrícolas según estudios realizados, por lo que se creó un comité compuesto por cinco entidades que son quienes evalúan las necesidades del mercado nacional.

Señaló que junto a los miembros existentes se van a sumar: el Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, y la Dirección de Compras y Contrataciones del Estado.

Puso como ejemplo el ajo que se adquiere desde China llega a 30 pesos, y vía la subasta sale a 90 pesos y al comercializarse en los mercados se vendía hasta 250 pesos, colocando toda la carga en el consumidor.

“Ahora mismo están bajando los precios de productos importados, porque lo que hemos hecho, con transparentar de una manera horizontal y participativa los permisos, a través de medidas de nuestro Departamento de Planificación que es quien sabe lo que tenemos en inventario”, explicó Limber Cruz.

Al referirse a los productos de origen orgánico, dijo que este tipo de mercado tiene dos vías, una mediante los laboratorios que certifican los productos y la otra, los mercados internacionales que son los que pautan los requisitos de los que quieren y las condiciones para adquirirlos.