Banco Central dice RD es de los países AL con más baja inflación
TRAS LAS HUELLAS DIGITAL, SANTO DOMINGO, REPUBLICA DOMINICANA, 25 DE AGOSTO 2022. Más de la mitad de los países de América Latina registran una inflación anualizada superior a la de República Dominicana, informó este miércoles el Banco Central (BCRD)
La institución rechazó análisis de economistas y dirigentes políticos que señalan a la República Dominicana como uno de los países con mayor nivel de alza de precios de la región.
Destacó además que República Dominicana se ubica dentro de los tres países de la región con menor desviación respecto al rango meta de este indicador.
Señaló que son diez los países que de julio de 2021 a julio de 2022 han registrado mayor tasa de inflación que República Dominicana: Venezuela (137.1%), Argentina (71.0%), Chile (13.1%), Costa Rica (11.5%), Nicaragua (11.5%), Paraguay (11.1%), Honduras (10.9%), Colombia (10.2%), Brasil (10.1%) y Uruguay (9.6%).
Dijo que ese período de doce meses es el adecuado para monitorear la inflación en las naciones.
“Hacer un análisis del comportamiento de la inflación utilizando períodos superiores a los doce meses, para deliberadamente, por razones e intereses particulares, presentar al país en la coyuntura como uno de los de más alta inflación en la región, como el realizado recientemente por algunos colegas economistas y dirigentes políticos, resulta desafortunado y pudiese contribuir a alterar las expectativas de los agentes económicos sobre la evolución futura de los precios y afectar sus decisiones de gasto e inversión”, sostuvo.
Añadió que de los siete países con menor inflación a la dominicana, tres se encuentran dolarizados (Panamá, Ecuador y El Salvador), por lo que no serían comparables al no seguir un esquema de política monetaria independiente.
«En términos de inflación acumulada en enero-julio 2022, República Dominicana se coloca en la misma posición con respecto a los pares de Latinoamérica», explicó.
Agregó que “una evaluación objetiva” permite apreciar que la coyuntura inflacionaria mundial de los últimos dos años es una secuela directa del impacto de la pandemia del COVID-19.
“Que trajo consigo disrupciones en las cadenas de producción y suministro, alza en los precios de las materias primas o commodities, incluyendo el petróleo, así como incrementos en el costo de los fletes marítimos y contenedores”, añadió.