Destacan aportes y desafíos pendientes de la agricultura familiar de América Latina y el Caribe

SAN JOSÉ.– La agricultura familiar es uno de los sectores más vulnerables al cambio climático debido a los eventos extremos relacionados con él, aunado a la falta de financiamiento, el deterioro de la salud del suelo y los altos costos de producción; sin embargo, en América Latina y el Caribe este grupo realiza importantes aportes a la resiliencia, adaptación y mitigación, los cuales muchas veces son invisibilizados.

Así lo señala el documento “El Acuerdo de París y el agro: una mirada a la implementación de las NDC en América Latina”, elaborado por el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), con el financiamiento del Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA).

El análisis expone el estado de la implementación en el agro de las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC) en Brasil, Bolivia, Colombia, Ecuador, Guatemala, Honduras, México y República Dominicana, establecidas para operativizar el Acuerdo de París, bajo la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC).

Este año, el agro y sus aportes a la mitigación del cambio climático y la sostenibilidad serán uno de los principales focos de atención durante la Conferencia de las Partes (COP27) de la CMNUCC, debido a los retos que la crisis climática impone y las oportunidades que brinda el sector para incorporar la ciencia, la innovación y la tecnología a las formas de producción de alimentos, un asunto fundamental para garantizar la seguridad alimentaria y nutricional del planeta.