Al menos 200 migrantes a la deriva frente a la costa tunecina esperan auxilio

TÚNEZ.- Al menos 200 migrantes, entre ellos varios bebés de pocos meses, se encuentran a la deriva desde hace más de ocho horas en una embarcación precaria frente al archipiélago tunecino de Kerkennah (sur) pese haber informado a la Guardia Costera, alertó este jueves la organización Alarm Phone.

«Nos han informado de que la guardia costera tunecina ha robado los motores de cinco barcos que intentaban huir de Túnez. ¡La Guardia Costera los está viendo a la deriva! ¡En Túnez, los negros son atacados por tierra y mar!», declaró la ONG en las redes sociales.

Según un testimonio recogido por Alarm Phone, estas personas se han visto obligadas a salir del país después de haber sido expulsadas de sus hogares y haber perdido sus puestos de trabajo, por lo que «sin ningún sitio dónde dormir, sin trabajo y sin dinero, nuestra única solución es irnos».

Semanas antes, el presidente Kais Said -que se arrogó plenos poderes en julio de 2021- instó a las fuerzas de seguridad a tomar medidas urgentes contra las «hordas» de migrantes subsaharianos en situación irregular, a los que acusó de formar parte de una conspiración para cambiar la demografía y la identidad «arabo-musulmana» de Túnez.

Un discurso de odio denunciado por organizaciones locales y la comunidad internacional, que ha provocado una campaña de ataques racistas y detenciones y empujado a cientos de personas – principalmente originarias de Guinea, Malí y Costa de Marfil- a agolparse frente a sus embajadas para pedir el retorno voluntario.

El Gobierno trató de rebajar la tensión y anunció que facilitaría medidas para «el retorno de quienes lo deseen», como eximirles del pago de la multa en la que han incurrido durante su estancia irregular, además de intensificar la asistencia social, sanitaria y psicológica a través de una línea telefónica de ayuda.

Según el Foro Tunecino para los Derechos Económicos y Sociales (FTDES), que sigue de cerca el fenómeno migratorio, cerca de 21.000 personas originarias del África subsahariana viven en Túnez -con una población de cerca de 12 millones- que hasta ahora era un país de tránsito hacia Europa, a tan sólo 150 kilómetros de distancia.