TRAS LAS HUELLAS DIGITAL, SANTIAGO, 31 de enero, 2016. -El Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) proclamó este domingo a Luis Abinader como su candidato presidencial para las elecciones a celebrarse el próximo  15 de mayo durante una asamblea nacional celebrada en esta ciudad, a la que asistieron más de dos mil quinientos delegados de todo el país.

El presidente del PRSC, ingeniero Federico Antún Batlle (Quique), previo a la proclamación de Abinader, declinó su candidatura presidencial como parte de su sacrifico y desprendimiento “convencido de que con este paso podemos avanzar en la consolidación de nuestra democracia y elevar los indicadores del desarrollo humano del país”.

La asamblea, celebrada en la Gran Arena del Cibao y que fue supervisada por delegados de la Junta Central Electoral (JCE), se inició justo a las 12:02 de la tarde con un quórum de 2015 delegados de un total de 2,584, y concluyó pocos minutos después de las 2:00. 

Además de los 2015 delegados de las diferentes provincias y municipios del país, también asistió una delegación del Partido Revolucionario Moderno, encabezada por el candidato presidencial Luis Abinader; el ex presidente Hipólito Mejía, Andrés Bautista y Jesús Vásquez, presidente y secretario general, respectivamente del PRM, así como representantes y de otras fuerzas aliadas.

Por el PRSC estuvieron en la mesa principal, además de Quique Antún, el presidente en funciones, Ito Bisonó; el secretario general, Ramón Rogelio Genao; el secretario de Asuntos Electorales, Máximo Castro Silverio; José Enrique Sued, Josecito Hazim, Sergia Elena de Séliman, Sergio Cedeño, Juan Luis Séliman, entre otros.

El discurso central del acto lo pronunció el ingeniero Quique Antún, quien manifestó que el país reclama a gritos que la oposición se consolide de verdad y luche por el cambio que necesita la nación.

“Nosotros somos la esperanza y somos el camino nuevo”, dijo en medio de fuertes y prolongados aplausos.

Manifestó que un faro de luz se enciende en el horizonte para iluminar el camino que se ha iniciado, “y ese ese faro de luz  nos conmina a luchar sin desmayo, con sabiduría, con desprendimiento, con unidad y confraternidad, por un país donde reine la paz, el progreso, la seguridad y el bienestar colectivo”.

Se refirió a la crisis económica, social y moral que dijo se anida desde hace tiempo en el país.

“Estoy consciente de que existen amenazas reales para que la República colapse, debido a un sistema político carcomido por la inmoralidad, la indolencia, la complicidad, la inequidad, la injusticia y los privilegios; donde un grupo se hace cada vez más rico, mientras la pobreza avanza incontrolable”, expresó.

Aseguró que ya no es posible resistir más inseguridad ciudadana, “ni tampoco es posible aguantar más el déficit del sistema energético,  falta de empleos, deficiencias del sistema de salud y la falta de atención a la producción nacional y el anquilosamiento e ineficiencia de los distintos ministerios y otros males”.

Sostuvo que esa situación que vive el país tiene a la población sumergida en la desesperanza, la incertidumbre y el desconcierto.

Quique Antún dijo asimismo que ante esa realidad, ante ese desafío, que no puede ser desdeñado, el país reclama a gritos un cambio de rumbo y una nueva forma de hacer política para lo cual es necesario construir una Nueva Mayoría.

 “Compatriotas y compañeros, ha llegado la hora de enfrentar el desafío y los retos que se nos presentan como Nación”, resaltó.

EL PACTO CON ABINADER

En su discurso, que se extendió por más de 20 minutos, el presidente del PRSC dijo que Luis Abinader y él hicieron un pacto en el que acordaron que quien estuviera en primer lugar en las encuestas sería el candidato presidencial de la alianza.

“Hicimos esas encuestas y la verdad es que en dos escenarios evaluados, Luis Abinader supera nuestra candidatura y tiene  mayores posibilidades de triunfo”, indicó.

Siguió diciendo que Abinader fue medido como candidato de la alianza, obteniendo un 38.6% de las preferencias del electorado frente a 48.2% de Danilo Medina, un 3% de Alianza País y un 10% respondió que no sabía.

Y en un segundo escenario –agregó- donde fuimos medido como el candidato presidencial de la alianza PRSC-PRM,  obtuve un 28.4%, Danilo Medina 52.6%, Alianza País 5% y aumenta a 14% los que no saben o no responden.

Dijo que por ello, cumpliendo lo pactado con Abinader, “decidimos declinar nuestra candidatura, renunciando a parte de nuestros sueños, pero firmes y convencidos de que con ese paso podemos avanzar en la consolidación de nuestra democracia y en elevar los indicadores del Desarrollo Humano del país”.

Manifestó que con esta decisión tomada por la Asamblea Nacional del partido de proclamar a Abinader “sellamos una alianza formal que ya había sido aprobada por nuestra Comisión Ejecutiva”.

Quique Antún manifestó que a partir de hoy “los reformistas tenemos una cita con la historia”.

Hoy –apuntó- el reformismo se llena de gloria porque decidió abandonar un nicho de comodidad y poder político, para luchar decididamente por cambiar la suerte de la República.

Anunció asimismo que los dirigentes y militantes de su partido estarán  en las calles, llevando candidaturas propias y aliadas, al tiempo que aseguró que los reformistas están recuperando su espacio político y su libertad de acción.

ESTAMOS EN SINTONÍA CON EL PUEBLO

El líder del Partido Reformista manifestó que vendrán tiempos duros, “vendrán duras y difíciles batallas pero tenemos la firme convicción de que hemos dado el paso correcto y que estamos en sintonía con lo que quiere el pueblo”.

“Vendrán las calumnias y los ataques virulentos. Pero no les tememos porque sabemos cómo se anida la cobardía en algunas almas mezquinas”, manifestó.

Dijo estar convencido de que con esta alianza han hecho lo correcto, “y por tanto, no me amedrentarán con ataques o con las labores de socavamiento que realizan algunos que medran en la sombra y que pretenden obtener posiciones futuras no por su trabajo, sino alimentando odios, rencores y bajas pasiones”.

Rememorando a Balaguer –dijo- quiero decirles compatriotas, que con cargos o sin cargos, como dirigente político o como simple ciudadano, todos mis esfuerzos estarán siempre al servicio del Partido Reformista y de las mejores causas del país.

Debemos trabajar incansablemente por un verdadero cambio que construya una Nueva Mayoría para gobernar, haciendo las transformaciones estructurales que demanda la Nación.