TRAS LAS HUELLAS DIGITAL, SANTO DOMINGO, REPUBLICA DOMINICANA, 21 de julio, 2016. -Rafael Calderón, senador del Partido de la Liberación Dominicana  (PLD), por la provincia de Azua declaró  este jueves que todos los proyectos aprobados en el Congreso y convertidos en Leyes,  han contado con el trabajo y el tiempo requeridos para su tratamiento y conocimiento.

La expresión del legislador peledeísta, miembro de su Comité Central, va en la dirección de aclarar  la percepción de que algunas leyes, como la de Armas, hayan sido  conocidas supuestamente sobre la marcha.

“Nosotros no dejamos de trabajar. Todos los días tenemos reuniones de comisiones, conociendo las iniciativas y  proyectos presentados. Naturalmente en algún momento hay que someterlo al hemiciclo”, defendió Calderón el trabajo de los congresistas.

El representante en la Cámara Alta  de Azua participó en el programa Hoy Mismo donde dijo que es errada la percepción de que se toma el proyecto de alguna gaveta y se aprueba, cuando la realidad  es que se ha estado estudiando, discutiendo y consultando

“Por ejemplo, la ley de arma, ¿cuánto tiempo tiene discutiéndose?”, reflexionó en una reseña periodística a cargo de la Secretaría de Comunicaciones del PLD.

Preguntado sobre su punto de vista sobre el Código Penal en el artículo que tiene que ver con la penalización del aborto dijo que se acoge a lo que establece la Constitución sobre el respeto a la vida de la concepción: “No podemos legislar en contra de un principio establecido en la Constitución de la República”, apuntó el senador.

Sobre la comisión que busca el consenso para la Ley de Partidos, con la participación de Monseñor Agripino Núñez Collado, plantea que las comisiones siempre son provechosas  y a veces oportunas, como en el caso actual

“En este caso yo siento que es oportuna, quizás no con la exigencia que hacen algunos sectores que quieren poner condiciones previas para incorporarse al diálogo”, cuestionó.

Manifestó que algunos quieran participar pero no para el consenso sino para plantear posiciones sujetas a ser vistas  como absurdas y ridículas.

“No puede ser que te inviten a una actividad y que cuando llegues digas: voy a participar pero primero hay que hacer esto y aquello,  no señor, a usted no lo invitaron para eso”, manifestó Calderón