TRAS LAS HUELLAS DIGITAL, LA PAZ, 08 de marzo, 2019. -El presidente de Bolivia, Evo Morales, anunció este viernes nuevas medidas legales para frenar los casos de violencia contra las mujeres bolivianas, en el marco del Día Internacional de la Mujer.

Durante un acto en la Casa Grande del Pueblo en La Paz, sede del Ejecutivo del país, Morales presentó las nuevas medidas destacando que lo importante es cambiar “el chip” de la violencia en cada persona, ya que no se trata únicamente de presentar o aprobar leyes para reducir este fenómeno social.

El gobernante aseguró que el colonialismo “ha dejado una mentalidad machista” en Bolivia y que cambiarla “tiene su tiempo”.

Morales comunicó, tras la primera sesión de un gabinete especial para atender casos de violencia hacia la mujer y los niños celebrada en esta jornada, que se elaboraron propuestas para “al menos” reducir esa lacra.

El jefe de Estado dijo que se elaborará una norma que permitirá a hombres y mujeres optar por el medio tiempo laboral de cuatro horas por jornada, de manera que puedan “atender su hogar” y estar más tiempo al lado, principalmente, de niñas y adolescentes.

Morales también señaló que en una semana se presentará un “proyecto de ley abreviada” para modificar los tipos penales de violación y homicidio, establecer la fusión de casos familiares, promover la reorganización de juzgados y permitir que las plataformas de activistas puedan acompañar los procesos penales relacionados a esta problemática.

Entre otro puntos, anunció la puesta en funcionamiento de un “sistema de alerta inmediata” para denunciar casos de violencia mediante teléfonos celulares y adecuaciones a la currícula educativa, junto a la formación de docentes para prevenir casos de violencia.

Morales planteó además revisar las brechas salariales entre varones y mujeres en el sector privado y apuntar por el “salario igualitario”, tarea que deberá emprender el nuevo Servicio Plurinacional de la Mujer.

Esos anuncios fueron recibidos entre aplausos entre los asistentes, mientras que en las afueras de la Casa Grande del Pueblo una veintena de activistas del colectivo Mujeres Creando protestaba contra el Gobierno boliviano.

Ese grupo enseñó varios calzoncillos gigantes, que representaban el machismo, con inscripciones que cuestionaban la labor del Ejecutivo frente a la violencia contra las mujeres y el ascenso de los feminicidios en el país.

Morales reconoció que su Gobierno tiene una “dura batalla” para frenar el índice de feminicidios, ya que según los datos que refirió se produjeron en 2018 al menos 128 decesos de mujeres en manos de sus parejas.

El gobernante lamentó que pese a esas cifras existan “muy pocas sentencias” por feminicidios en Bolivia.

Pese a esa realidad, Morales destacó algunos aspectos positivos en favor de la mujer, como la paridad en la representación política, que sitúa al país sudamericano en el segundo lugar mundial tras Ruanda con más mujeres en su Parlamento.

Además, destacó que uno de los principales logros de su gestión en temas de género es el acceso de las mujeres a la titulación de la tierra, ya que actualmente un 45 por ciento es titular de un parcela en comparación al 15 por ciento que tenía ese derecho en 2005, antes de que asumiera el Gobierno de Bolivia.