ARGENTINA, 01 de diciembre, 2014. -El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) de Argentina comenzó el año 2014 con una buena noticia: bajó el alerta de calor de rojo a amarillo en Buenos Aires.

La capital y su área metropolitana deja así temporalmente la histórica ola de calor, que estuvo acompañada de una crisis en el servicio de electricidad, causando malestar entre la población y críticas entre el gobierno, la oposición y las empresas encargadas del sector.

El SMN pronosticó una temperatura máxima de 33°C para este miércoles y de 28°C para el jueves.

De todos modos se advierte que las temperaturas pueden seguir siendo un riesgo para la población más vulnerable: bebés, niños pequeños, ancianas y enfermos.

En cuanto a los problemas de electricidad, el gobierno aseguró que se ha restituido al 98% de los usuarios.

La ola de calor a nivel nacional dejó hasta ahora un saldo de siete muertos, en las provincias de Santiago del Estero y Salta.